ARGENTINA EN 1886

 

 

ARGENTINA EN 1886


El 12/10/1886, Julio Argentino Roca, entregó el mando a su sucesor legal, Dr. Miguel Juárez Celman, quien accedió a la presidencia por ser concuñado del presidente saliente y designado sucesor por este para que asegurara y ampliara los favores y beneficios obtenidos por la trenza oligárquica a la que ambos pertenecían a expensas de las tierras y el dinero público. Celman era un abogado cordobés, jefe nato del liberalismo, fue gobernador de Córdoba de notable labor. Su vicepresidente fue el Dr. Carlos Pellegrini.


Durante la presidencia de Miguel Juárez Celman (1886-1890), se crearon numerosos edificios públicos y puertos. Al comienzo de su mandato el comercio floreció, aumentaron las líneas férreas, en solo un año (1889) entraron al país 260.900 inmigrantes. se decidió el predominio del capital extranjero en la economía y en la política Argentina. Su política global de privatizaciones fue acompañada por una aguda corrupción.


El país se vio sumido en una gran crisis económica. El unicato tuvo su máximo esplendor. La especulación desenfrenada y los errores económicos cometidos durante los tres primeros años de gobierno provocaron gran inquietud entre la naciente clase media. Comenzó una dinámica actividad política. Importantes figuras de la oposición liderada por Mitre, el caudillo Leandro N. Alem, y dirigentes católicos liberales, como Estrada y Goyena, formaron la Unión Cívica cuyo presidente fue Alem. También participaró Bernardo de Yrigoyen. Una consecuencia de este movimiento fue la renuncia colectiva de todos los ministros de Juárez Celman. La esencia del movimiento era: democracia y ordenamiento institucional inspirada en ideales de Mayo y Caseros.


La Unión Cívica levantó en armas contra Juárez Celman (Revolución del Parque, 1890). A pesar de su fracaso (la represión estuvo en manos del general Levalle), éste hecho significó la caída de su gobierno. Juárez Celman renunció.